Este dominguito lo disfrutamos intensamente. Una rutita dominical matutina entre los bosques de Alhaurín el Grande sirvió para estirar las piernas y oír las historias de este entorno. Un almuerzo en Tottam sirvió para reponer fuerzas con unos platos exquisitos en sus bucólicos jardines. En la sobremesa, Mundo Divino (María del Tango y Carlos Tato) hicieron las delicias en un concierto íntimo que nos transportó a otros mundos. Creo que fue el día perfecto!!!


